C.D. DE MONTAÑA SENDERISMO DE RUTA
DISTANCIA A RECORRER ---- 14,3 KM
DIFICULTAD ---- Moderada
DESNIVEL DE SUBIDA ---- 680 M
DESNIVEL DE BAJADA ---- 577 M
TIPO DE RUTA ---- CIRCULAR
TIPO DE COMPLICACIONES ---- En el
tramo medio de la ruta, una vez pasado el desfiladero, la ruta transcurre por
vereda entre piornos y escobas hasta llegar al punto más alto.
En el paso por el desfiladero hay que
cruzar varias veces el arroyo, con un poco de precaución es totalmente
superable.
En época de deshielo y de lluvias fuertes,
puede que el desfiladero sea intransitable. Se recomienda hacer la ruta desde
Junio a Marzo.
Mapa de ruta:

Tras el cafetito, la foto de grupo para dar comienzo a
nuestra aventura
Y por fin, damos comienzo a nuestra aventura, promete ser de
lo más entretenida ……
Como a kilómetro y medio llegamos al paraje denominado
el Manadero donde realizamos una parada para que todo el que quiera suba a ver
la cueva donde está la virgen del mismo nombre.
Tras
descansar un poco, nos adentramos en el mítico desfiladero de los Calderones,
un lugar bello donde los haya. Tuvimos una gran suerte, el rio a pesar de la época
del año, venia totalmente subterráneo pudiendo atravesar el desfiladero sin
complicaciones.
Ya
superado el desfiladero, volvemos a encontrarnos con el rio el cual nos
guardaba grandes sorpresas y más bonitos lugares donde sacar alguna fotografía más.
El musgo congelado, todo un espectáculo para nuestras atentas miradas |
El gran jefe a la sombra |
Al poco la vereda por la que caminábamos junto al rio,
desemboca en un valle abierto donde hay un pequeño refugio, lugar ideal para
hacer una breve parada y comer algo para reponer fuerzas.
Ya con las pilas cargadas continuamos camino, no sin antes
gastarles una pequeña broma, jajaja, la senda del jabalí, les hicimos atravesar
por un pequeño piornal para que disfrutasen un poquito.
Los servales estaban esplendorosos, su color rojo inundaba
todo el monte miraras para donde miraras
|
Poco a poco la pista por la que caminamos se iría
transformando en una leve vereda que en algunos puntos casi ni se veía, la
subida a la collada de Tijero fue algo durilla por la abundante vegetación y
sin apenas senda, pero con un poco de esfuerzo conseguimos alcanzarla.
Y por fin, llegó la hora de la comida, un socavón en lo alto
de una loma fue nuestro improvisado comedor, a decir verdad, era un lugar de lo
más acogedor, el solecito calentaba y nos hizo sentir muy a gusto.
Nuestra borrachina particular jajaja |
Con la barriga bien llena y tras haber descansado un buen
rato, continuamos camino hacia Portilla de Luna, tras un prolongado y empinado
descenso por un cortafuegos llegamos a un precioso robledal que por una
empinada vereda nos acerca a las mismas puertas de Portilla.
Una vez en Portilla descansamos un poco a la sombra de una
pared y hacemos amigos, un cachorro de carea nos pide mimos y como no podía ser
menos tenemos que dárselos.
Por fin nos disponemos a concluir nuestra aventura, solo nos
queda una pequeña cuesta y como dos km de descenso hasta llegar de nuevo a
Piedrasechas.
Y esto es todo por hoy amigos, continuaremos deleitándoos con
nuestras intrépidas aventuras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario